Cualquiera de las sesiones de nuestros proyectos es más que interesante. Sin embargo la sesión de hoy la podemos catalogar de única y, por supuesto, de inolvidable. Y es que la ciencia a veces discurre por caminos inesperados y cuenta con protagonistas excepcionales. Quizá inesperado fue que, mientras nos preocupábamos por las propiedades saludables de los pimientos, surgiera un comentario sobre algo que uno de nuestro compañeros había oído decir a su abuelo: que los pimientos dulces que crecían junto a otros picantes adquirían esta última propiedad. Quizá inesperado pudo parecer también que tanto nuestro compañero como su abuelo abordaran todo un planteamiento científico para comprobar esa hipótesis y que desarrollaron experimentalmente a lo largo de todo el verano en la finca de la familia. Y excepcional fue la actitud de D. José López Raya, el abuelo de Nacho implicándose en todo un proyecto científico. Como sabemos, los resultados no corroboraron la hipótesis y nuestro objetivo ahora es elaborar un diseño experimental que nos permita probar las distintas hipótesis que hemos propuesto.
Nacho, D. José López Raya y María José López. |
Hoy
hemos tenido la inmensa satisfacción de tener con nosotros a D. José
López Raya, de compartir con él y con su hija María José, la madre de
Nacho, la experiencia de toda una vida dedicada a la agricultura y a sus
saberes. Y, cómo no, hemos hablado de pimientos, de sus variedades y
carácterísticas y de cómo los cultiva. También nos han acompañado María
Jesús Campos y José Manuel Palma.
Zona de cultivo de los pimientos. En primer plano, uso de bañeras como semilleros para obtener las plántulas. |
Nos
ha confirmado cómo es algo ampliamente observado por los agricultores
que los pimientos dulces se vuelvan picantes cuando crecen próximos a
éstos y cómo la mayoría de ellos relaciona este cambio con el riego. Nos
ha comentado cómo él ha observado este cambio cuando cultivaba los
pimientos en una era y no en hilera, como lo hizo en esta ocasión.
También nos ha hablado de cómo los paisanos se han interesado en el
proyecto contribuyendo a la divulgación del mismo en su entorno.
Leo
Otero expone los diversos planteamientos experimentales que se están
proponiendo en el proyecto. En la foto José Manuel Palma y María Jesús
Campos. |
Por nuestro parte, Leo Otero ha planteado los distintos modelos experimentales que han surgido a lo largo de las sesiones anteriores del proyecto y que deberán ser discutidos antes de hacer la propuesta final, con la que D. José ha mostrado su disposición a poner en práctica junto a Nacho y la familia. De hecho ya había organizado los semilleros para la nueva plantación de pimientos, aunque la enfermedad le ha obligado a posponerla. Y de la misma manera que se planifica un experimento científico, nos ha mostrado un esquema que ha preparado con la disposición de los semilleros y las variedades que va a plantar.
Esquema con la disposición de los semillaros presentado por D. José. |
Seguimos avanzando en el proyecto. Ahora disponemos de mucha más información para que vayamos aquilatando un diseño experimental que nos permita comprobar nuestras hipótesis. Es momento de que sigamos haciendo propuestas y compartiéndolas en este blog. Esperamos vuestros comentarios sobre esta sesión.
Y no queremos acabar esta entrada de nuestro blog sin volver a mostrar nuestro agradecimiento a D. José por compartir con nosotros esta hora maravillosa. Hoy, nuestra clase ha sido especial, y también sobre eso debemos reflexionar, sobre otras formas de aprender. Nuestra formación, tanto científica como humana, debe beber de muchas fuentes y hoy hemos tenido un claro ejemplo de ello.
D.
José López Raya, María José López, María Jesús Campos, José Manuel
Palma, Nacho Mengíbar y el resto de compañeros de Biología de segundo de
bachillerato. |
Verdaderamente, gran parte de la sabiduría se encuentra en la experiencia. Gracias a Antonio Quesada por la oportunidad de compartir la vida a través de sus clases, de sus proyectos y de su capacidad como profesor. Y gracias a Pepe Palma y Mª Jesús Campos por el interés y la implementación. Fue precioso compartir con científicos, profesor y alumnado esta maravillosa experiencia. Gracias de corazón! Estoy deseando seguir el próximo reto con estos exquisitos pimientos y este excelente grupo!
ResponderEliminarMaría José
En primer lugar me gustaría agradecer a todos los alumnos el gran trabajo que están realizando y especialmente al "abuelo José" por compartir con nosotros su experiencia y su sabiduría en un trabajo tan arduo como es el del agricultor.
ResponderEliminarY ya metiéndome un poco en los resultados expuestos, me surgen varias reflexiones.
Se habló que los pimientos a veces presentaban acrimonia y otras veces no y que podría venir por la vía genética. Yo creo que si fuera genético, siempre picarían. Las semillas que producen pimientos picantes, siempre darían pimientos picantes y parece ser que no es el caso.
También se habló que el motivo fuera la polinización. Si hablamos de un campo, relativamente pequeño, al final casi todas las plantas presentarían dicha acrimonia porque serían polinizadas por las mismas abejas una y otra vez.
Después de escuchar al "abuelo José" de como había sido la plantación y especialmente el sistema de riego de este año, creo que ahí podría estar el por qué. Según entendí en años anteriores se plantó en era y se regó por inmersión y este año se había plantado y regado en arriate. Podría ser que el agua al regar por inmersión vaya calando poco a poco la tierra de forma que las plantas puedan ir "soltando" las sustancias encargadas de transferir la acrimónia entre las plantas de pimiento y si el riego se produce en arriate, el agua iría "demasiado rápida" para impregnarse de estas sustancias.
Ya me vais contando que os parecen y las pegas que tienen mis reflexiones.
Saludos.
Marichu
Fantástico resumen de nuestras hipótesis acerca de la transmisión de capsaicina Marichu. Hablando un poco de genética aplicada a nuestro proyecto, tuvimos una reflexión interesante que compartió con nosotros Pepe Palma: Por ejemplo, una vez acabado el experimento de este verano, resultó que los pimientos dulces no picaban, mientras que las guindillas sí (como de normal). Hablamos de un tema que me despertó gran curiosidad, relacionado con las semillas. Estas podían compartir genes de pimientos picantes y pimientos dulces, que suponiendo que el gen picante fuera el dominante y el gen dulce el recesivo, las semillas que recolectamos de la plantación de este verano, podrían llevar en su interior genes que se expresen una futura plantación. Haciendo que los pimientos dulces piquen, ya que su semilla sea híbrida (picante dominante—no picante recesivo).
ResponderEliminarCambiando de tema, desde que tengo uso de razón, mi abuelo se guía por las lunas para tener una cosecha más fructífera, como él dice: "esto lo hacían los antiguos" y resulta que es completamente verdadero. Puede que no incide directamente la luna sobre la cosecha, pero sí que la luna establezca unas condiciones climatológicas perfectas para favorecer el crecimiento y rendimiento de la semilla. He visto zanahorias que miden 25 cm aproximadamente (plantadas en base al calendario lunar) respecto a otras plantadas en una fecha no acorde con el calendario lunar, midiendo escasamente 5-10 cm. Un saludo, seguimos trabajando.
Ignacio Mengíbar López
Según los modelos experimentales se podría organizar uno en el cual tendríamos q plantar una mata de pimientos dulces en un macetero a parte para q así no comparta agua con otras plantas pero a la hora de regarla se podría hacer con agua picante (mezcla de agua con las semillas de los pimientos picantes machacadas) de esa manera se podría comprobar si la mata de pimientos absorbe el picor y esos pimientos se vuelven picantes, de esa manera si los pimientos siguen siendo dulces la única manera de traspaso de picante sería por polinización.
ResponderEliminarManuel Benítez Muñoz
Es una cuestión en la que debemos de elaborar diferentes hipótesis y ponerlas en práctica.
ResponderEliminarYo creo que deberíamos de plantear dos situaciones distintas:intentar volver a repetir la distribución y plantando en una era, para ver si eso fue lo que provocó que está última vez no picaran y otra distribución en la que comprobemos si los pimientos pican por la distribución o por la herencia genética por una transmisión de la capsaicina, como planteo leo en un primero momento rodeando los pimientos con plantas de guindilla.
Ángela Solera Robles
La cuestión es que tenemos un montón de modelos experimentales para comprobar si el picante se transmite por el agua o por el polen, entonces tenemos que descubrir cual es el mas efectivo y se puede llevar a cabo. En mi opinión un método efectivo para comprobar si el picante se transmite a través del polen y no por el agua es un modelo que comento Leo que trataba en poner un planta de pimientos picantes en el centro y alrededor de la planta poner pimientos no picantes y así podríamos comprobar si se transmite por el polen ya que a la hora de regar las pimientos no picantes el agua no ha estado en contacto con los pimientos picantes. Por ultimo una manera de saber si el picante se transmite por el agua podríamos utilizar el sistema que ha comentado mi compañero Manu que es regando los pimientos no picantes con semillas de pimientos picantes machacadas.
ResponderEliminarConclusión tenemos que pensar en que modelo es el mejor para cada caso.
Nicolás Navarro Weis
Tras todas las hipótesis y modelos experimentales, creo que la mejor opción para comprobar si el picante se transmite por agua o mediante la polinización, es ir descartando opciones, por lo que empezamos a comprobar si se transmite mediante el agua. Para ello, se pueden intentar dos opciones:
ResponderEliminar1) Regar con agua que contenga las semillas de los pimientos picantes machacadas, por lo que si la mata de pimientos absorbe el picor y esos pimientos se vuelven picantes podremos saber que, si los pimientos siguen siendo dulces esta hipótesis queda anulada.
2) Modelos independientes de plantación: una primera opción, es que se planten semillas de pimientos dulces para ver si de verdad tienen el gen picante. La segunda opción, es que se plante en una era y el agua vaya desde los pimientos picantes hasta los pimientos dulces para que cuando pase el tiempo, se pueda verificar si se ha transmitido la capsaicina de unos a otros.
Si ninguna de estas funciona, podremos seguir investigando y tener una sola hipótesis (polinización).
María Fernández Rojas
Respondo a todos.
ResponderEliminarEn primer lugar, felicidades por aportar tanta reflexión interesante y jugosa en este debate. Un debate que nos va a permitir trazar las líneas maestras para construir nuestro proyecto, que de eso se trata esta idea.
Creo que estamos en condiciones de ello. Así que sentiros como verdaderos arquitectos, como ingenieros, como CIENTÍFICOS, porque váis a diseñar todo un proyecto científico. Cosa que se hace en cursos avanzados del Grado de Biología en la Universidad de Granada.
Pronto nos vemos.
Mucho ánimo, and may the power be with us.
José Manuel Palma
En cuanto a los modelos de plantación para comprobar la transmisión del picor a los pimientos creo que estará complicado ,ya que proponíamos la transmisión a través del contacto directo de las raíces de los pimientos y la transmisión a través del agua. Pero esta hipótesis no se me ocurre como podemos comprobarla, ya que para que el agua de riego de los pimientos picantes pase a los pimientos dulces la distancia entre ambos debe ser corta y por tanto no podremos afirmar con certeza que sus raíces no están en contacto. De otro si se plantaran a suficiente distancia se tendría que usar mucha mas cantidad de agua ,por lo que si ese agua contiene sustancias que provoquen el picor en los pimientos dulces con tal cantidad de agua esa posible sustancia llegaría diluida a los pimientos dulces y no causaría el mismo picor.
ResponderEliminarJuan Miguel Arrufat Cano